Armar el taller «Huerta Viva» fue la manera más natural de llegar con Betarraga a todas las personas que nos siguen con ganas y curiosidad por aprender, sembrar y compartir sus conocimientos.
El taller Huerta Viva, nació para transmitir las bases de lo que fuimos construyendo con el tiempo: la certeza de que un jardín vivo es aquel que entiende, cuida y respeta el suelo.
Un suelo lleno de vida, dispuesto a entregar todo lo que las plantas necesitan para crecer sanas, fuertes y diversas.
Es aprender a observar antes de intervenir, a pensar si conviene plantar antes o después de la primera helada, a tomar conciencia de cómo queremos consumir: sin agroquímicos que intoxican el suelo, a las plantas y también a nosotros.
Comer de nuestra propia cosecha nos invita a una pregunta guía:
¿Qué nos gusta comer en casa y cómo queremos que sea esa comida?
Desde ahí empieza todo.
Sembrar con sentido, producir desde el deseo y extender esa pregunta hacia cada decisión cotidiana: qué compramos, qué reutilizamos, qué compostamos.
Porque cada producto que no se recicla y cada resto que no vuelve a la tierra se convierte en un desecho, y nuestro planeta tiene una capacidad finita para sostenerlo todo.
Entender eso es el primer paso para transformar nuestra forma de habitar la tierra —desde la huerta, desde casa, desde lo que elegimos cada día. 🌱
Cerrar una etapa para abrirotra.
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Encontrarnos al final del taller, después de tres encuentros por Zoom, fue una manera de cerrar una etapa para abrir otra.
La pantalla nos permitió llegar lejos, pero la presencialidad nos devolvió algo esencial: ese ritmo humano que sólo aparece cuando estamos juntos, cuando las miradas se cruzan, cuando las manos se ensucian de tierra.
Ahí estábamos, compartiendo saberes y semillas.
Porque eso es también Huerta Viva: un espacio para sembrar conocimiento, pero sobre todo, vínculos. 🌾
El encuentro en el vivero Herbarium
Para reunirnos, el lugar elegido fue Herbarium, un vivero en Pilar que invita a quedarse: elegir plantas, hojear libros, descubrir objetos como mucho de nuestros productos de la tienda de Betarraga.
Un espacio donde cada rincón respira naturaleza y diseño, el contexto ideal para compartir con el equipo de Betarraga un almuerzo en la parrilla que se encuentra dentro del vivero.
A la charla se sumó Juan de Nateien, con sus conocimientos y productos, aportando su mirada y experiencia para seguir tejiendo redes entre proyectos que buscan lo mismo: una forma más consciente y viva de cultivar. 🌿
por Paula Colombini – Betarraga
